Los trastornos menstruales constituyen cada vez más uno de los motivos más frecuentes de consulta médica y farmacéutica entre los padres y las adolescentes, llegando a tener una prevalencia de más de un 30% en el primer año de edad ginecológica. (Rodriguez Jimenez & Hernandez de la Calle, 2014) (Comité Nacional de Endocrinología, 2010)

Las evidencias científicas en los últimos años sugieren que multitud de plantas medicinales tradicionales podrían ser útiles tanto en la prevención como en el tratamiento de patologías entre las que destacan las patologías menstruales. En el caso concreto del jengibre, existen evidencias científicas sobre su uso en diversas enfermedades, pero todavía no existe un mecanismo totalmente definido.

Zingiber officinale sustentándose en sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes y la desencadenación sucesiva de la inhibición de la actividad de tromboxanos y prostanglandinas junto con la reducción de los factores inflamatorios tales como la IL-6, IL1, IL-2, su influencia inhibidora de la actividad de la COX-2, la lipooxigenasa, TNF-alfa, entre ellas, crea  la necesidad imperiosa de estudiar en profundidad su utilidad. (Aryaeian & Tavakkoli, 2015)

Dentro de las patologías menstruales, podemos distinguir dos principalmente:

1. Hipermenorrea

Un tercio de las mujeres experimenta en algún momento de su vida una hemorragia menstrual muy abundante. Más concretamente, un 5% de las mujeres en edad reproductiva, acude anualmente al médico para tratar dicha patología. (Das, Daksh, & Ahmed, 2021)

Sin lugar a duda, se trata una patología muy frecuente en el día a día de la mujer, por ello, recae gran importancia la revisión del posible beneficio del jengibre frente a dicha patología. Para ello se ha procedido al estudio sistemático de la siguiente revisión bibliográfica: “Herbal Medicines in Idiopathic Heavy Menstrual Bleeding: A Systematic Review” (Javan, y otros, 2016)

Las conclusiones de los autores que componen la revisión bibliográfica junto con lo resultados obtenidos en los estudios clínicos, nos indican que el uso de 250 mg de jengibre podría reducir el sangrado menstrual excesivo, en cantidades muy satisfactorias (llegando a reducir un 50% de dicho sangrado).

2. Dismenorrea

La dismenorrea consiste en un dolor pélvico crónico producido durante el periodo menstrual de la mujer, siendo también definida como calambres y menstruación dolorosa.

Consiste en una patología que aparece principalmente en los primeros años de la menstruación, teniendo una mayor prevalencia en edades comprendidas entre los 15-25 años, siendo menos frecuente en edades superiores a los 30 años. (Monterrosa Castro, 2001)

Junto con la Hipermenorrea, la Dismenorrea primaria se trata de una de las alteraciones de la salud de la mujer con mayor probabilidad de absentismo laboral y escolar, dado el carácter mensual e invalidante que puede llegar a ocasionar, llevando consigo asociados unos síntomas de dolor intenso de elevada relevancia. (Hurtado, Martinez, & Roldan, 2005)

Para poder estudiar la posible utilidad del jengibre en la Dismenorrea, se procede al estudio de la siguiente revisión sistemática “Efficacy of Ginger for Alleviating the Symptoms of Primary Dysmenorrhea: A Systematic Review and Meta-analysis of Randomized Clinical Trials” (Daily, Zhang, Kim, & Park, 2015):

Esta revisión sistemática recoge los ensayos clínicos realizados hasta la fecha sobre el jengibre y la dismenorrea, y en todos ellos se ha observado una reducción importante del dolor asociado a esta condición.

El diagnóstico precoz de la dismenorrea es fundamental para aliviar los síntomas incapacitantes asociados a dicha patología, siendo la farmacia comunitaria un pilar esencial en dicha función.

Son muy frecuentes las consultas de mujeres adolescentes sobre dolores abdominales específicos relacionados con la dismenorrea, los cuales desde la misma oficina de farmacia se podrían aliviar mediante productos naturales cada vez más valorados por los pacientes. En este grupo podríamos incluir el Zingiber officinale. (Alamilla, 2019)

Según un informe de mercado realizado por Transparency Market Research (Santos & Moran, 2015), el mercado de productos nutracéuticos en 2017 llegaría a alcanzar un crecimiento del 6,3% mientras que el mercado de prescripción desde 2005 posee una tendencia de estancamiento en su crecimiento. Las farmacias comunitarias han evidenciado un incremento de la presencia de dichos productos nutracéuticos y fitoterápicos, llegando en el caso del jengibre a disponerse de 96 productos siendo éste su compuesto principal de su composición.

La revisión sistemática realizada sobre la Dismenorrea muestra con claridad que entre 750-2000 mg al día de jengibre durante los 3- 4 primeros días del ciclo menstrual, podría ser un potencial tratamiento para los efectos de la dismenorrea primaria, como son el dolor y la incomodidad asociada a dicha patología.

Artículo extraído del Trabajo "Fitoterapia con jengibre para la salud de la mujer" presentado por D. Miguel Cano Pérez a los premios Fundación Hefame "Salud, Mujer. Autocuidado" 2021.

Bibliografía:

Alamilla, E. (2019). Dismenorrea: enfermedad o síntoma. 

Aryaeian, N., & Tavakkoli, H. (2015). Ginger and its effects on inflammatory diseases. Adv Food Technol Nutr Sci Open J, 97-101. 

Comité Nacional de Endocrinología. (2010). Trastornos del ciclo menstrual en la adolescencia. Arch Argent Pediatr, 108(4), 363- 369. 

Daily, J., Zhang, X., Kim, D., & Park, S. (2015). Efficacy of ginger for alleviating the symptoms of primary dysmenorrhea: a systematic review and meta-analysis of randomized clinical trials. Pain Medicine, 16(12), 2243-2255. 

Das, S., Daksh, S., & Ahmed, A. (2021). Das, M. S., Daksh, M. S., Ahmed, A., & Chandrul, K. A Review on Menorrhagia: Investigation, Miracle Role of Herbs and Medical Treatment. International Journal for Research, 8. 

Hurtado, B. G., Martinez, R. C., & Roldan, J. R. (2005). Dismenorrea primaria y fisioterapia. In Fisioterapia (Vol. 27, pp. 327-342). Servier. 

Javan, R., Mahdi , Y., Seyed-Mohammad, N., Amiri, P., Mosavi-Jarrahi, A., Modiramani, P., & Naghedi-Baghdar, H. (2016). Herbal medicines in idiopathic heavy menstrual bleeding: a systematic review. Phytotherapy research, 30(10), 584-1591. 

Monterrosa Castro, A. (2001). Dismenorrea primaria: visión actual. Rev. colomb. obstet. ginecol, 342-354. 

Rodriguez Jimenez, M., & Hernandez de la Calle, I. (2014). Trastornos menstruales de la adolescencia. Adolescere, 2(3), 7-17.